Zhu Cheng, uno de los escultores más famosos de China, ha ayudado a nueve de sus estudiantes de arte para crear una réplica de la Venus de Milo con excrementos. No se si en realidad estamos hablando de excrementos humanos o animales, pero estoy bastante seguro de que es este último.
Pero lo más increíble de esta estatua fue comprada por un coleccionista de arte suizo, por la asombrosa cifra de 300.000 yuanes (45.113 dólares) 😀

