La artista de Reino Unido Inge Jacobsen ha encontrado una ingeniosa manera de convertir las imágenes comerciales como las portadas de la revista Vogue en obras de arte únicas. Al parecer, pasó unas 50 horas cosiendo a mano sobre portadas de Vogue originales, lo que permite que parte de la imagen para mostrar a través de colores como fondo.
Bastante curiosas las imagenes

