Kerry Howley, una estudiante de arte creativo, de Cambridge, Inglaterra, está creando un gran revuelo en el mundo del arte, con su colección de delicados collares hechos con cabello humano.
El principal material para las obras maestras de Howley fue proporcionada por uno de las amigas de su madre, una mujer japonesa que tenia el pelo hasta la cintura. Ella sólo se corta el cabello una vez cada cinco años, y cuando se lo corto, se lo dio todo a Kerry. La estudiante de arte de 23 años de edad utiliza formas abstractas inspiradas en los patrones de papel tapiz, y pasó más de 60 horas de trabajo en cada uno de los cinco collares de pelo que ha creado hasta ahora. Unas obras de arte bastante interesantes.
